Historia de Trolli


Herbert and Willy Mederer
Todo empezó con la pasta

La antigua fábrica de Fürth, Alemania
Refuerzos para los más golosos
Y, gracias a la popularidad de la confitería de Willy Mederer, este amplía la gama de productos para incluir cubos de sorbete, láminas de coco, plátanos de gelatina, almendras y cacahuetes recubiertos de azúcar y, posteriormente, fruta en gelatina, monedas de menta y galletas de chocolate. En ese momento, Mederer los comercializa bajo el nombre de «Wilmed». El nuevo nombre se creó a partir de las tres primeras letras de su nombre y apellido.
De tal palo...

Antigua planta de producción de Fürth, Alemania
... tal astilla. La demanda de los productos de pastelería de la marca Wilmed es grande. La empresa necesita todo el apoyo posible, así que Herbert, el hijo de Mederer, de 17 años, comienza a ayudar en el negocio familiar. Da sus primeros pasos en la empresa de su padre, «Wilmed» mientras sigue estudiando para convertirse en un maestro pastelero. Para convertirse en la persona perfecta para las labores de liderazgo en el futuro, reúne años de experiencia en el extranjero, en Francia y Austria.
¡Aquí llega Trolli!
La familia sigue acabando con todo ápice de aburrimiento en el mercado de la pastelería con sus constantes innovaciones. Las golosinas de fruta son ahora las favoritas de los más golosos. Esto requiere un nuevo nombre y lo encuentran rápidamente: ¡TROLLI! Los trolls, esas pequeñas criaturas de los bosques que son agradables con los niños pero no tanto con los adultos y a los que les encantan las travesuras. Desde ahora, esa es también la filosofía de la marca.
¡Trolli se va a EE.UU.!
En 1982 se crea el primer Trolli Original, los Sour Apple Rings. En poco tiempo, a este le siguió un suplemento afrutado, los Peach Rings. Ambos siguen representando un importante volumen de ventas. Los cómicos productos de Trolli conquistan también EE.UU. Tras la muerte del fundador de la empresa, Mededer padre, en 1984, su hijo Herbert asume el liderazgo de la empresa como socio ejecutivo principal. ¡TROLLI se va a EE.UU.!
¿Puede la locura ir a más?
Mederer está en plena ebullición con ideas extraordinarias. Trolli desarrolla sin cesar innovadoras golosinas de fruta. El nuevo éxito de ventas de los caramelos de goma: “Wurrli”, un gusano de colores brillantes, se crea en un innovador torno de latón. Inspirándose en el éxito de sus creaciones, el joven Mederer dirige todas sus energías hacia el descubrimiento de nuevas creaciones en el mundo de las golosinas de fruta. Su objeto más preciado: la Trolli Burger. Formada por tres capas, hace las delicias de todos los entusiastas de los caramelos de goma.
¡Trolli gana!
En 1993 se crea el líder de ventas de Trolli Original, los Sour Glowworms, y se convierten en poco tiempo en un objeto de culto. Ese mismo año, Herbert Mederer recibe el premio Candy Kettle Award en reconocimiento de su ingenio. Ahora, Trolli empieza a aumentar sus actividades internacionales. El propietario establece bases de fabricación en España e Indonesia, así como una planta de envasado en la República Checa.
Se buscan refuerzos
La demanda de los caramelos de goma sigue aumentando. La familia Trolli se lanza a la búsqueda de refuerzos y, en 1998, integra al especialista en golosinas Efruti. De esta fructífera colaboración surge Trolli Yo-Fruit, la primera golosina rellena en el universo de la pastelería. En el año 2000, obtienen una ayuda especial de Gummy Bear Factory, con sedes de producción en Boizenburg y Hagenow.

Fase de construcción del almacén de estanterías altas en Hagenow.
TROLLI se va a oriente
Trolli se encuentra en el lado soleado del mundo de los caramelos de goma y sigue creciendo a un buen ritmo, dirigiéndose hacia China. Se crea una sede de fabricación en Guangzhou, que se encarga de los mercados en China, Extremo Oriente y Oriente Medio. En 2002, Mederer vuelve a entrar en el mercado americano, esta vez con la marca «e.frutti», con la que suministra sus locas creaciones a los mercados de EE.UU., Canadá y México. Durante este tiempo, Playmouse y Milky Cow también se lanzan al mercado.
Tecnología punta
En la sede de Hagenow, se introduce un moderno almacén de estanterías altas, garantizando así estándares de última tecnología. Se trata de una de las instalaciones más modernas de Europa. Pero no solo eso: la fabricación también se lleva a cabo al máximo nivel técnico.